ESPAÑA FLAMENCA
ESPAÑA FLAMENCA
¡VIVA LA ALEGRÍA! 
Prensa:
14/06/2017 18:18
El pleno del Congreso de los Diputados ha rechazado por 82 votos a favor, 170 en contra y 97 abstenciones la moción de censura que había presentado el grupo parlamentario de Unidos Podemos contra Mariano Rajoy y a la que optaba como candidato a la Presidencia del Gobierno Pablo Iglesias.
La moción solo ha contado con el apoyo de los diputados del grupo parlamentario de Unidos Podemos, ERC, Compromìs y EH-Bildu, mientras que han votado en contra el PP, Ciudadanos, UPN, Foro Asturias y Coalición Canaria, y el PSOE, PNV, PDeCAT, PNV y Nueva Canarias se han abstenido.
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Al Congreso ha llegado un ángel… exterminador. Creía que doña Irene Montero era, sobre todo, una psicóloga, pero ha demostrado que es una excelente recopiladora de causas judiciales. Durante algo más de dos horas se dedicó a exponer casos de corrupción que están siendo investigados o ya están juzgados y que la mayoría de la gente conoce. Y su conclusión es que la corrupción está en la médula del partido gobernante únicamente y que los seres humanos no son inevitablemente corruptibles.
Y luego va su compañero Pablo y afirma que “España es mejor que sus políticos”, como si él no fuera un político. En una democracia representativa a los políticos se les supone espejo, para bien o para mal, del pueblo que los votó. Si no es así, es que algo gordo falla. En cuanto a lo que afirma don Pablo de que con él llegaría una gobernación "moderna y eficiente", mientras no defina lo que significa moderna, no me ha dicho nada. En todo caso, le doy las gracias al señor Iglesias por haber votado, en la comisión correspondiente, mantener la caja única de la Seguridad Social, aunque esa posición es incompatible con su defensa de un estado plurinacional, lo que hace desconfiar.
Señora Montero, la corrupción, al menos la tendencia, nace con nosotros, y otra cosa es que se despierte más en unos escenarios que en otros. Los corruptos que hay en los partidos, en especial por su número en el partido que gobierna, no quiere decir nada más que han caído en la tentación.
Don Luis Fernández, profesor de psicología en la Universidad de Santiago de Compostela y autor del libro “Psicología de la corrupción y los corruptos”, cree que “El ser humano es un animal con una tendencia biológica a la corrupción. Sólo precisa que se dé una combinación de un entorno propicio, una oportunidad y una personalidad dispuesta”.
Me apunto también a la opinión del venezolano Fermín Mittilo: “La corrupción es la norma común a todos los regímenes, economías y sociedades. Es endémica, crónica y omnipresente, parte integral de la política y un problema universal perdurable y extendido. Es la debilidad humana y la imperfección organizativa la que la hace inevitable”.
Por eso, cuando se oye en boca de los políticos “Hay que acabar con…”, me suena fatal. Ni pueden acabar con la corrupción, ni con los asesinatos, ni con las violaciones, ni con las guerras ni… Desgraciadamente debemos conformarnos con establecer las condiciones sociales y legales para disminuir esas lacras en todo lo que sea posible. Y no hay más. Ahora toca que nuestros legisladores se ganen el sueldo y encuentren las medidas que dificulten a los tendenciosos llegar a corromperse.
Si imaginamos la corrupción política como partidos de futbol y tiros a puerta, está claro que, por ahora, el PP, PSOE ganan a Ciudadanos y Podemos por goleada. El PP por número de goles y el PSOE, sobre todo, por la millonada en cuestión. Ciudadanos y Podemos tienen todavía pocos casos de corrupción; pero que tengan cuidado porque, como en el fútbol, los resultados pueden ser solo cuestión de tiempo.
Respecto a las formas y maneras de los diputados oradores, siento vergüenza como español educado en la oprobiosa dictadura, sin más añadidos.
Como postre, unos refranes: "Al que al cielo escupe, en la cara le cae". "De ninguno has de decir, lo que de ti no quieras oír"."Hablar bien y dar buena respuesta, mucho vale y nada cuesta".
Hasta otro día.
(Se me olvidaba: Sin ser de su cuerda, me gustó la intervención del señor Ábalos).
