¡QUIÉN TE VIO Y QUIEN TE VE!
10-3-2021 (Pleno de control del gobierno en el Congreso)
Pablo Iglesias: “Voy
a trabajar para garantizar que el
derecho constitucional a la vivienda se empiece a cumplir…”.
(Aunque no lo
garantice la Constitución, digo yo)
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Las
intervenciones de Pablo Iglesias en el Pleno del Congreso de hoy me han
recordado mis tres años de alumno en un convento franciscano, allá por los años
50. Su tono de voz, sus inflexiones, sus modulaciones de voz me han traído el
recuerdo de Fray Generoso (O.F.M). Por su analogía oratoria me voy a permitir
llamar “Fray Coletas” al diputado Iglesias. Sólo encuentro una diferencia entre
ambos, y es a la hora de lectura de textos. Cuando Iglesias ha leído artículos
de la Constitución, lo ha hecho utilizando la lectura mecánica, no la
comprensiva, sobre todo al referirse al problema de la vivienda. Mira que hay
que artículos en la Carta Magna que RECONOCEN Y PROTEGEN derechos, pero son
contados los que se GARANTIZAN, y ninguno se refiere a la vivienda. Otra cosa
es que se promuevan condiciones para hacer efectivo el derecho a una vivienda
digna. Le ruego, Fray Pablo, que
consulte el diccionario de la RAE:
“Garantía: Efecto de afianzar lo estipulado. Seguridad o certeza que se tiene
sobre algo. Cosa que se asegura y protege contra algún riesgo o necesidad”.
Y lo curioso es que, salvo el derecho a la educación, tengo para mí que los
poderes públicos no garantizan, y lo saben, éstos: Artículo 18.1. “Se garantiza el derecho al honor, a la intimidad
personal y familiar y a la propia imagen”. Artículo 27.3. Los poderes públicos
garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la
formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones.
¡Quién le escuchó en la Escuela de Segovia
(2016) y quién lo oye ahora! “No gobernaremos nunca
si no tenemos la mayoría absoluta para gobernar”. ”Compañeros, hay que vivir
ocupando”. Y no sigo reproduciendo sus
lindezas oratorias de entonces. Lo que pienso de usted, hermano en Cristo, se
lo puede imaginar. Lo que piensen sus seguidores es cosa de ellos.
En
cuento a la facilidad para el aplauso de nuestros representantes del Pueblo, sólo
se me ocurre decir que en otros tiempos se aplaudían grandes “faenas”
oratorias, frases redondas e impresionantes, “pases” sensacionales… En este
Congreso se aplaude cualquier improperio o parto verbal.
( Acabo de escuchar la noticia de que comienza la orgía y el desenfreno de mociones de censura y convocatorias de elecciones. Que los dioses nos amparen)
Hasta otro día.
Juanma